jueves, 21 de julio de 2016

Platero y yo


Exultante. Contenta. Entusiasmada. Radiante. Feliz. Bendecida.

Ayyy no encuentro LA palabra que describa exactamente lo que siento!!!!

Es un combo de todas…. más todos los sinónimos que existan en el idioma castellano, zulú, chino mandarín, inglés, francés, etc, y dialectos sobre la faz de la tierra.

Cuando Mariana en su cuenta de Instagram subió orgullosa (también me siento orgullosa, agregar arriba) la foto de su “platero”, mueble bello y vintage si los hay para guardar “platos” (obvio!!) y vajilla de toda índole, (si es bella como la de ella sentite realizado), hubo una avalancha de mujeres, entre las que me cuento, que deseamos fervorosamente tener uno igual.

Mariana, muy orgullosa, nos contó que dicho mueble maravilloso había sido realizado por Eugenio, su marido, y ahì, la avalancha de mujeres, entre las que me cuento, deseamos fervorosamente tener un marido igual!!!

Como a Eugenio (mmmmm en realidad a Mariana…), no le cierra mucho el temita de la poligamia, nos preparó este DIY extraordinario para que lo hagamos con nuestras propias manos, las manos de nuestro peor es nada, las de algún hermano, vecino o carpintero amigo.

Los dejo con él, que nos cuenta con lujo de detalles este paso a paso!!!


Buen día! Soy Eugenio, autodidacta temerario con herramientas e ideas. También soy marido de Mariana, la mentora de casi todos mis proyectos.

En esta ocasión les voy a presentar un DIY de cómo fabricar un wall plate rack cabinet, o para los amigos, un “platero”.


Pueden conseguir un viejo mueble colgante de dos estantes como el que utilicé yo o bien ir a una casa que venda muebles de pino comunes que también va a funcionar genial. La pintura lo es todo.


Les advierto que soy un tanto exagerado para los refuerzos y este caso no fue la excepción, ya que la idea fue que el mueble aguante bastante peso. En el caso de mi estantería, por ser vieja y estar medio descuajeringada, la desarmé, encolé y atornillé completa antes de empezar las reformas.


PASO A PASO:


·         Conseguir el mueble base. Es importante que tengan a mano el plato más grande que quieran colocarle para saber si ese mueble nos será de utilidad. En este caso, para que tengan referencia, tiene en su parte interna 28,5 de alto x 25,5cm de profundidad y entran bien la mayoría de los platos que tenemos.


·         Para que los platos queden bien ordenados necesitaremos colocarle varillas adelante y atrás. En mi caso compré en una maderera varillas de ½ pulgada (1,27cm) de roble. Suelen venir de 1.5, 2 o 3 metros de largo según el lugar. Para que tengan referencia necesitarán mínimo unos 3cm entre varillas para colocar platos playos. Entonces, sumando el ancho de la varilla, deben calcular las marcas para luego agujerear a no menos de 4,5cm entre una y otra. Estas cuentas lógicamente van a depender del largo de tu mueble. En mi caso tiene 88cm de largo y entran 20 varillas ( + otras 20 para atrás ) y caben 21 platos.


·         La mayoría de los “plateros” que vi suelen estar armados en una sola pieza, pero yo preferí hacer que la parrilla de adelante se pueda remover para facilitar la limpieza y eventualmente por si algún día hay que repintarlo, para tener mejor acceso al interior. Esto lo resolví colocando las varillas sobre dos tiras de madera de unos 2cm de alto x 3 o 4cm de ancho x el largo que tenga la parte interna de nuestro mueble. Luego esta estructura se puede afirmar con solo 2 tornillos por arriba y otros dos por abajo.


·          Para cerrar el fondo utilicé una tira de machimbre que me había sobrado de la galería, pero pueden usar lo que quieran… mdf, fenólico, etc. Una vez pintado y con los platos, la verdad, no se ve.

Para darle terminación a la unión del fondo y principalmente para poder fijar con clavos el machimbre al ras de la cara posterior, le clavé por delante una varilla cuadrada de 1x1cm, que se puede obviar si usás un fenólico o mdf finito por fuera ya que no lo separa tanto de la pared. 


·         Como les comenté más arriba, soy un poco obse de la robustez y para garantizarme poder sentar a un elefante, a los dos ganchos superiores de anclaje a la pared, le sumé dos esquineros de chapa abajo para colocar dos fijaciones extra y así garantizar que no haga toda la fuerza solo de arriba.


·         Llegó el momento de la acción. A hacer los agujeros! Utilicé una mecha plana para madera de la misma medida que la varilla, en este caso de ½ pulgada. Luego cortamos las varillas a la altura indicada y las colocamos encoladas con adhesivo vinílico para madera. Repetimos luego el mismo trabajo en las varillas de atrás, pero OJO! A no equivocarse con la altura, ya que las de atrás son más largas porque deben encastrar en la base y tapa del mueble.


·         Una vez que se secó el adhesivo aplicamos masilla para madera sobre la tapa del mueble para borrar las marcas de los agujeros, lija y a pintar!!

Dato de “color” o no tanto… La mayoría de los “plateros” tienen pintadas las varillas, es lo más fácil para no tener que enmascararlas, pero preferí dejarlas al natural ya que con el correr del tiempo y el roce al poner y sacar los platos, es inevitable que se vayan despintando.














Espero les haya servido el tutorial. No es muy sencillo pero es cuestión de animarse. El resultado es gratificante y por sobre todo, muy útil.

Hasta la próxima!

Bueno, no sé ustedes pero yo terminé de enamorarme!!!!
Del platero digo…. jajaja
No queda más que agradecer y aplaudir de pié a este mega capo que junto con su amada esposa Mariana son un dúo dinámico muuuuy groso, muy creativos, muy ingeniosos y además tienen muy buen gusto. Encima tienen la generosidad de compartir sus conocimientos con todos nosotros (si todavía no lo leyeron, no se pierdan "Talento al cuadrado", la entrada donde nos muestran cómo empapelaron una de las paredes de un baño con hojas de periódicos de la década del 50!!!!).
GRACIAS Eugenio!!!!!! Hubiera estado bueno que incluyas una foto tuya para que las chicas te pidan autógrafos cuando te reconozcan por la calle! jajaja